Genesis Yasmin Zacarias Castro
Nutricionista
La Hipertensión Arterial se define como la elevación persistente de la Presión Arterial (fuerza ejercida por la sangre contra cualquier área de la pared arterial) por encima de los límites considerados como normales, en las personas adultas se determina cuando la presión es igual o mayor a 140/90 mm/Hg, dicha enfermedad es caracterizada por un incremento continuo en la presión sanguínea de las arterias.
En la actualidad esta afección se asocia a una tasa elevada de morbilidad y mortalidad, así también es uno de los problemas de salud pública más importantes, pues aproximadamente el 30 a 45 % de las personas adultas lo padecen. Por otra parte, la Hipertensión es una dolencia silenciosa e invisible pues se ha establecido que al menos 16 millones de personas en el mundo ni siquiera saben que la presentan. Cabe añadir, que la sociedad Europea de Cardiología estima que, en el 2025, la enfermedad afectará a un 40 -65% de una población obesa y envejecida, pues la sociedad cada vez más se encamina hacia el sedentarismo.
Con base a lo anterior, se enfatiza que pueden existir factores que la desencadenen, como: la edad, la obesidad, el exceso de ingesta de sal, la falta de potasio, el elevado consumo de alcohol y tabaco, la falta de práctica de ejercicios físicos y el estrés, agudizan los riesgos de la enfermedad. Sin embargo, es importante señalar, que hoy en día se sabe que el factor genético también cuenta en la aparición.
Estudios científicos han identificado que existen factores controlables como: obesidad, consumo excesivo de sal, alcohol, falta de ejercicio, estrés, tabaquismo y la cafeína. Por tal razón, el ejercicio o sedentarismo es un factor importante de riesgo para el desarrollo de esta enfermedad, por lo tanto, la práctica habitual de ejercicios físicos permite reducir el riesgo de muerte por enfermedades cardíacas. Por lo que, la práctica regular de alguna actividad física es tan beneficiosa, que debe convertirse en parte de la vida diaria y en un hábito como comer, dormir o trabajar, de igual forma, puede mejorarse el peso corporal, evitando así la obesidad y prevenir y controlar la Diabetes Mellitus.
Cabe agregar que, el tratamiento farmacológico como Irbesartán con Hidroclorotiazida por si solo, ha tenido éxito en la reducción de complicaciones, pero, es importante que las personas con hipertensión realicen modificaciones en el estilo de vida, con un programa que incluyan mejoras en el ejercicio y la condición física pues las personas físicamente activas disfrutan de una mayor calidad de vida, pues padecen menos limitaciones que normalmente se asocian a las enfermedades crónicas y al envejecimiento; además están beneficiadas por una mayor esperanza de vida. Mejorando el estilo de vida, se reducen los riesgos de enfermedades cardiovasculares y cáncer, que son causas fundamentales de muerte en la humanidad.
En la tabla siguiente se realizan algunas recomendaciones para el entrenamiento físico en el paciente con Hipertensión Arterial.
Período de Calentamiento y Enfriamiento de 5 a 10 Minutos Estiramiento, calistenia, ejercicio aeróbico de baja intensidad como caminata o ciclismo |
Tipos de Ejercicio Ejercicio aeróbico: Ciclismo, caminata y natación. Ejercicio de resistencia: levantamiento de pesas. Las máquinas preferiblemente deben ser seguras y fáciles de usar |
Intensidad Ejercicio aeróbico: trabajar de 55% a 79%. |
Duración El ejercicio aeróbico se debe realizar entre 30 y 45 minutos, por ejemplo, en caminadora; se debe procurar mantener al paciente en la Frecuencia Cardiaca objetivo la mayor parte de la sesión |
Frecuencia El ejercicio aeróbico se debe realizar de 3 a 4 veces por semana; cuando dentro de los objetivos está la reducción de peso, se requiere aumentar la frecuencia de ejercicio |
Bibliografía
1. | Moraga C. Prescripción de ejercicio en pacientes con hipertensión arterial. Rev. Costarr. Cardiol. 2008; 10(1-2). |
2. | Gómez L, Menéndez J, Dauva C. Ejercicios físicos para adultos hipertensos. Conrado. 2020; 16(77). |
3. | Briones E. Ejercicios físicos en la prevención de hipertensión arterial. MEDISAN. 2016; 20(1). |
4. | Guitiérrez O, Calderón M, Meneses M, Narváez F, Alanya C, Infante G. Efectos del ejercicio físico en la presión arterial en mujeres. Actividad Física y Deporte. 2020. |