Importancia de la Salud Mental en Nuestras Vidas

Genesis Yasmin Zacarias Castro
Nutricionista

La salud mental es una parte muy importante del bienestar de una persona, pues la buena salud de la mente hace posible que las personas puedan materializar su potencial, y poder afrontar el estrés para una vida normal, así también, trabajar de una forma más productiva y efectiva para realizar aportación a su comunidad.

Una de las definiciones más utilizadas de salud mental es la de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que la define como “un estado de bienestar en el que el individuo se da cuenta de sus propias capacidades, puede hacer frente a las tensiones normales de vida, puede trabajar productiva y fructíferamente, y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”, por tal razón, se considera que la salud mental es parte importante en la vida de las personas, ya que puede llegar a afectar su vida escolar y laboral al provocar sentimientos de angustia. Por tanto, los problemas de salud mental y conductual se caracterizan por cambios en el pensamiento, el comportamiento o el estado de ánimo asociados con la angustia o el deterioro en el funcionamiento psíquico general.

La Depresión continúa ocupando la principal posición entre los trastornos mentales, y es dos veces más frecuente en mujeres que hombres. Por otra parte, en las Américas, la prevalencia de demencia en los adultos mayores (más de 60 años) oscila entre 6,46 % y 8,48 %.  Así también, las proyecciones indican que el número de personas con este trastorno se duplicará cada 20 años.

Por ende, es indispensable conocer algunas características que deben tener las personas para mantenerse mentalmente sanas:

• Estar satisfechas consigo mismas: No deben estar abrumadas por sus propias emociones (rabia, temores, amor, celos, sentimientos de culpa o preocupaciones).

• Sentirse bien con los demás. Ser capaces de amar y tener en consideración los intereses de los demás. Las relaciones personales son satisfactorias y duraderas.
• Ser capaz de satisfacer las demandas que la vida les presenta. Aceptar sus responsabilidades ante los problemas que se van presentando. Modificar el ambiente cuando esto es posible y ajustarse a el cuándo es necesario.

Afortunadamente, la persona puede actuar por si mismas para mejorar la salud mental, a través de algunas estrategias de afrontamiento:

• Mantenerse conectado con la familia, los amigos, y la comunidad de forma creativa.
• Manejar las emociones difíciles con aceptación, atención plena, y actividades relajantes y/o placenteras.

• Estar físicamente activo: el ejercicio regular puede tener un impacto profundamente positivo en la Depresión, la Ansiedad y el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (enfatizando que existen algunos fármacos que pueden ayudar a evitar la Depresión como Trazadona o Escitalopram los cuales deben ser recetados por un profesional de la salud). También alivia el estrés, mejora la memoria, aumenta la calidad del sueño, y mejora nuestro estado de ánimo.
• Dormir lo suficiente: El sueño afecta su estado de ánimo. Si no duerme bien, puede sentirse irritado y enojarse más fácilmente. A largo plazo, no dormir bien puede aumentar la probabilidad de tener Depresión. Por ello, es importante asegurarse de tener un horario de sueño regular y dormir lo suficiente todas las noches, practicar una buena higiene de sueño, pues el dormir es adecuado para la salud, no obstante, en algunos casos los médicos pueden recetar algunos fármacos como Melatonina que ayuda para tener un mejor descanso.
• Alimentarse saludablemente: Una buena nutrición le ayudará a sentirse mejor físicamente, pero también puede mejorar su estado de ánimo y disminuir la ansiedad y el estrés. Además, no obtener una buena cantidad de ciertos nutrientes puede contribuir a algunas enfermedades mentales. Por ejemplo, puede haber un vínculo entre niveles bajos de vitamina B12 y la Depresión. Consumir una dieta bien balanceada puede ayudarle a obtener la cantidad suficiente de nutrientes que necesita.

Bibliografía