Cuando las mujeres empezamos nuestro embarazo, es normal que empecemos a preparar todo para la llegada de nuestro bebé, cualquier cosa mínima que vemos o hacemos es pensando en la llegada de esa personita. Pero a veces, olvidamos que hay cuidados indispensables que debemos tener en nosotras. Así como lo es la lactancia materna. 

Desde el embarazo nuestros pezones empiezan a cambiar su tamaño y sensibilidad. Y cuando tu recién nacido empieza a alimentarse con ellos crea presión sobre todo mientras se adapta a ese proceso de alimentación y esa combinación de presión, succión y muchas veces la posición del bebé de forma inadecuada, empiezan a provocar una fuerte irritación y dolor en los pezones.

Este proceso ocurre al inicio, en el tiempo en el que tu bebé y tú empiezan a acostumbrarse, pero luego, lo normal es que este dolor se detenga. Si en caso los dolores siguen y el pezón empieza a sangrar deberás visitar a tu medico. Por esto, es importante que tengas en mente algunos cuidados para tratar la irritación.

Algunos de los cuidados que las mamás deben tener para evitar o disminuir la irritación del pezón son:

  1. Lavar el área del pezón  una vez al día con agua tibia pero sin jabón. El jabón elimina los aceites naturales necesarios para mantener húmeda la piel. 
  2. Deje que el área se seque sola. 
  3. Use almohadillas absorbentes de algodón que se puedan lavar en lugar de las descartables. No utilice almohadillas absorbentes con forro plástico. Éstas mantienen la piel demasiado húmeda. 
  4. Utilice copas protectoras de lactancia sobre su areola dentro de su sostén de lactancia. Las copas protectoras protegen sus pezones del roce contra el sostén de lactancia y están disponibles en algunas farmacias.

Lo recomendable para estos casos es buscar productos que también ayuden a prevenir la irritación y regenerar la piel. Y lo aconsejable es que contengan ingredientes como Lanolina 100% pura. Estos productos ayudan a proteger los pezones delicados o secos, la piel seca del bebé y de la mamá. Lanolina 100% pura es el ingrediente activo recomendado actualmente por la Liga de La Leche Materna, es un producto seguro para la madre y el bebé y puede aplicarse varias veces al día.

Fuentes:

aboutkidshealth.ca

albalactanciamaterna.org

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