Genesis Yasmin Zacarias Castro
Nutricionista
La enfermedad de Parkinson es un trastorno neurodegenerativo y progresivo debido a la pérdida de neuronas, el cual se presenta por múltiples manifestaciones motoras y no motoras. Este proceso patológico se presenta años o décadas antes del inicio de los síntomas no motores.
Cabe resaltar que esta patología avanza de manera rápida, por lo que, es necesario realizar un diagnóstico temprano para poder ayudar al paciente a tener una vida más larga y saludable. Es por esto que se han establecido 10 signos o síntomas que cuando se detectan por separado no deben preocupar, no obstante, cuando se detecta más de uno es necesario que la persona deba consultar a un médico.
- Temblor
Debe estar atento a las señales que presenta el cuerpo, ya que, si nota que su cuerpo produce un temblor en manos, dedos, mentón o labios, de la misma forma en las piernas al mantenerlas relajadas podría estar presentando signos tempranos y comunes de la enfermedad de Parkinson. Cabe resaltar que el temblor puede considerarse normal después de realizar actividad física y cuando se sufre una herida.
- Letra pequeña
Este signo se presenta de forma repentina y radical en relación con el cambio del tamaño o la forma de la letra, y se observa de manera muy rápida. La escritura puede variar a lo largo de la vida de una persona por diversos factores como: la rigidez de los dedos o por la pérdida de la visión.
- Pérdida del olfato
La perdida del olfato puede determinarse al momento que el paciente presenta dificultades al oler ciertos alimentos como: plátanos (bananos), pepinillos en vinagre, o canela ante esta complicación debe consultar a un médico. Ya que el olfato puede cambiar durante un resfriado o gripe, pero esta manifestación clínica desaparece al momento que se descongestiona la nariz.
- Problemas con el sueño
Ante la presencia de temblores, las personas durante la noche podrían sentir que se mueven mucho, patea o da puñetazos mientras duermen, es probable que otra persona lo note, ya que los movimientos durante el sueño profundo pueden ser signos de la enfermedad de Parkinson.
- Dificultad al caminar o moverse
El paciente puede sentir rigidez en todo el cuerpo, brazos o piernas. Es importante mencionar que la rigidez puede desaparecer al moverse, sin embargo, en el caso de las personas que presentan enfermedad de Parkinson esto no desaparece. Por ende, las personas deben de prestar atención al momento de caminar, ya que los brazos no se mueven, y los pies se “pegan” al piso.
- Estreñimiento
El estreñimiento puede aparecer en diversas situaciones como la falta de fibra o agua en la dieta, sin embargo, si el paciente no encuentra una causa debe acudir al médico.
- Voz baja
El tono y volumen bajo de la voz puede cambiar por distintas razones, sin embargo, si se ve acompañado por otro signo temprano de la enfermedad de Parkinson, debe acudir a un médico.
- Falta de expresión facial (aspecto de máscara)
La falta de parpadeo es un signo muy común de la enfermedad de Parkinson, por lo que este signo se presenta como la falta de expresiones faciales. Es indispensable mencionar que algunos medicamentos pueden causar este tipo de reacción, no obstante, al momento de suspenderlos el síntoma desaparece.
- Mareo o desmayo
El mareo puede ser un signo de alarma para la presión arterial baja la cual puede ser relacionada con distintas enfermedades, como la enfermedad de Parkinson. Por tanto, si alguna persona presenta este signo constantemente debe consultar a un médico.
- Encorvamiento de la espalda
Se dañan los reflejos posturales a nivel del sistema nervioso, por ende, se produce una inestabilidad postural y a medida que avanza la enfermedad las personas con Parkinson tienden a adoptar una postura encorvada.
En base con los signos anteriormente mencionados, se consideraba que la enfermedad de Parkinson tenía consecuencias exclusivas de carácter motor, como el temblor. No obstante, se ha determinado que también provoca daños en otros sistemas como el autonómico (cambios en la sudoración, hipotensión ortostática, alteraciones gastrointestinales, entre otras), el límbico y el somatosensitivo, además de serias modificaciones en la conducta y estado de ánimo.
No existe cura para esta enfermedad, pues son múltiples los factores que intervienen en el estado de salud de la persona con Parkinson, por lo que el tratamiento tiene como objetivo mejorar los síntomas y en prolongar la autonomía del paciente el mayor tiempo posible. El tratamiento farmacológico principal se basa en medicamentos como: dopamina, antagonistas de la dopamina, inhibidores de la Monoaminooxidasa y agentes anticolinérgicos como Biperideno.
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